Si bueno es acercarse al tajo para conocer de cerca qué se cuece en los orígenes, mejor aún es hacerlo entre caras conocidas, amigos en algunos casos. Este fin de semana un grupo de veinte bloggers gastronómicos fuimos convocados por la Diputacion de Jaén al evento Virgen Extra de Jaén 2.0,  jornadas coordinadas por Fernando Ortega de iloveaceite, y Alfonso Lopez, autor de Recetas DeRechupete.

Como decía al principio, muchos ya nos conocíamos. Tapas&Blogs fue el punto de unión que hizo que algunos blogs gastronómicos establecieran vínculos, sinergias y colaboraciones hace un año. Como una bola de nieve, vamos sumando rostros, conociendo compañeros en cada nueva aventura que emprendemos. Y ahí estábamos todos, empujando unas maletas, claramente desproporcionadas unas de otras, hacia la bodega de un autobús rumbo a Jaen.



El viaje corto, como son los periplos en buena compañía. Fue levantar los ojos y vernos inmersos en el mar de olivos, con el paso ralentizado por un remolque lleno de oliva. Allí comenzamos a darle a la cosa, desequilibrando el autobús cuando todos corrimos a la cabecera a fotografiar y filmar el suceso. Acabada la línea continua, seguimos el camino recuperando la velocidad.


Una vez en Ubeda, nos reunimos en el primer acto del programa, una cata de aceites de oliva (y no digo de aceites de oliva virgen extra porque pudimos catar algunos que no lo eran). Emilio Tíscar, presidente de la Denominacion de Origen Sierra de Cazorla, fue el encargado de guiar la cata. Aunque no se quedó solo en eso, antes que los aceites llegaran a nuestras manos, nos impartió una clase magistral sobre el aceite de oliva virgen extra, que en un momento se convirtió en un debate abierto en el cual expresamos nuestras dudas y compartimos experiencias al respecto.


El aceite de oliva virgen extra se clasifica a traves de la cata, valorando las percepciones de los defectos y los atributos positivos. Esta debe realizarse en un vaso de cristal azul, tapado por un vidrio reloj, y posarse en la mano, para que alcance la temperatura óptima de 28ª. Será aceite de oliva virgen extra cuando tenga 0 defecto y frutado superior a cero, y aceite de oliva virgen cuando tenga defecto inferior a 2,5 y frutado superior a cero.

Previo a la cata, tuvimos la posibilidad de conocer los olores que corresponden a estos defectos: atrojado, avinado, mohoso, rancio entre otros, a través de unas muestras de estos patrones. Catamos cuatro aceites, entre los cuales se encontraban algunos que no eran virgen extra, pudiendo de esta manera diferenciarlos en la práctica.


Con aromas, ideas y conceptos hirviendo en nuestras cabezas, salimos hacia Baeza tras un escueto descanso. Allí disfrutamos de un paseo por la ciudad, a cargo de Sebastián Moreno, de Pópulo, que nos brindó un documentado e instructivo recorrido. La jornada terminó con una ruta de la tapa en los restaurantes La Góndola y El Trillo, con platos elaborados con aceite de oliva virgen extra.

Una  vez en el hotel, el salón principal se convirtió en una cálida tertulia, y eso que a esas horas, la chimenea estaba apagada.